SOS: Tiburones en peligro en las costas de la Región

A bordo del velero Blue Panda, técnicos de la organización conservacionista WWF han recorrido el Mediterráneo desde Alicante al Mar de Alborán, para recabar datos sobre los tiburones y rayas presentes en estas aguas. Parte de estas actividades se desarrollan por ANSE en las aguas de la región.

Al igual que está ocurriendo a nivel mundial con estas especies, las poblaciones mediterráneas han disminuido de forma drástica en los últimos 50 años, debido principalmente a la sobrepesca, la presencia de redes de deriva ilegales y la degradación de sus hábitats. El objetivo del proyecto es que se conozcan mejor estas especies y contribuir a su recuperación, porque son una pieza clave del ecosistema del Mediterráneo.

A bordo del velero Blue Panda, técnicos de la organización conservacionista WWF han recorrido el Mediterráneo desde Alicante al Mar de Alborán, para recabar datos sobre los tiburones y rayas presentes en estas aguas. Al igual que está ocurriendo a nivel mundial con estas especies, las poblaciones mediterráneas han disminuido de forma drástica en los últimos 50 años, debido principalmente a la sobrepesca, la presencia de redes de deriva ilegales y la degradación de sus hábitats. El objetivo del proyecto es que se conozcan mejor estas especies y contribuir a su recuperación, porque son una pieza clave del ecosistema del Mediterráneo.

En las aguas del Mediterráneo viven 73 especies diferentes de tiburones y rayas, pero más de la mitad están en peligro. «Lo más preocupante es que la situación del mar parece estar empeorando: el estado de 11 especies se ha deteriorado en la última década, mientras otras veinte especies están clasificadas en peligro crítico», detallan desde WWF. Estamos hablando de especies como el cazón, el tiburón rojo, la mantelina, el marrajo, el pez guitarra o la tintorera. Esta última, en concreto, clasificada como en peligro crítico en el Mediterráneo, representa más del 70% de las capturas de la pesca con palangre de superficie, seguida por el marrajo (muy conocido en la Región de Murcia), otro pelágico en peligro crítico.
Para poner solución a este grave problema medioambiental, WWF ha puesto en marcha una expedición desde Alicante hasta la isla de Alborán, pasando por Cabo de Palos, en Cartagena, con el objetivo de recabar información sobre estas dos especies para salvarlas de la extinción.

La expedición a bordo del velero de WWF Blue Panda, y en la que también se ha involucrado a asociaciones ecologistas regionales como ANSE, ha centrado sus esfuerzos en una doble tarea: por un lado, en la recogida de muestras para analizar el ADN ambiental de las distintas áreas marítimas visitadas (en especial, la del Mar de Alborán); y por otro lado, en el marcaje de ejemplares de rayas y tiburones para conocer mejor sus desplazamientos.

Marcaje de una raya en aguas de Cabo de Palos

En la Región de Murcia, los trabajos se han desarrollado en la zona de Cabo Cope y Cabo de Palos, donde se ha comenzado a marcar a especies como el tiburón pintarroja y la raya pintada, según detalla Aixa Morata, bióloga de ANSE, que se ha sumado a este ‘viaje’ junto a Pedro García, director de esta asociación ecologista en la Región. «Los tiburones, al estar en los niveles altos de la cadena trófica, ejercen una función de control de otras especies y son un indicador del estado del ecosistema», explica Morata. En la Región hay unas 45 especies de tiburones, un dato bastante desconocido entre la población «porque es un animal muy difícil de observar en su medio».

El muestreo de ADN ambiental, una técnica que ha comenzado a implantarse de forma pionera en el Mediterráneo, y que consiste en tomar muestras de agua a distintos estratos, ha servido para extraer el material genético. Esto permite saber qué especies se encuentran en esa área marina o que han habitado en ésta en otros momentos y ello da idea de la diversidad de la zona, señala Óscar Esparza, coordinador de áreas marinas protegidas en WWF. «El objetivo es mejorar el conocimiento de estas especies, que son bastante desconocidas, incluso entre los pescadores«, señala Esparza.

Botella de muestreo para ADN ambiental

Por ello, otra de las acciones fue ofrecer un curso a pescadores y personal de lonja para ayudarles a identificar correctamente tiburones y rayas. «La identificación errónea de estas especies es un problema que dificulta la recogida de información a través de las lonjas y las capturas declaradas por el sector pesquero», añade José Luis García Varas, responsable del programa marino de WWF España. «Continuaremos organizando este tipo de talleres en la Región de Murcia y otras partes de Andalucía para mejorar este problema», añadía. Trabajar con los pescadores es una parte fundamental de la expedición de WWF, para que también formen parte de la solución. «Tenemos el reto de poner en marcha planes de gestión para la conservación de tiburones y rayas y encontrar medidas, en colaboración con el sector científico, los investigadores y la administración, que disminuyan las capturas no intencionadas de estas especies, así como el resto de amenazas que enfrentan», afirma José Luis García Varas. «A través de dicha colaboración, pretendemos también elaborar un plan de seguimiento y conservación para las especies más amenazadas de la zona», señala García Varas. El mensaje está claro: «Los tiburones no son nuestros enemigos; si conseguimos recuperar sus poblaciones, será un buen indicador de que el Mediterráneo goza de buena salud. Esta recuperación también ayudará a combatir el cambio climático», explica.

La expedición del Blue Panda, que ha recorrido más de 700 millas náuticas durante diez días (del 20 al 30 de septiembre), se desarrolla con el apoyo de la Fundación Banco Santander, dentro de la iniciativa Santander for the Seas.

Adaptado del artículo original de Victoria Galindo, publicado en La Opinión de Murcia el 02/10/2022.