Más de 300 escolares participan en actividades para conocer las ramblas de su entorno, y el papel de las mismas a la hora de protegernos de los efectos del Cambio Climático y colaborar en su recuperación. Los estudiantes han propuesto medidas para disminuir las emisiones de efecto invernadero y han participado en la plantación y mantenimiento de especies autóctonas.
La pasada semana, más de 300 escolares del Colegio San Vicente de Paúl de Cartagena y un centenar del colegio Narval de Santa Ana, Cartagena, participaban en charlas sobre la relación entre el cambio climático y las ramblas. A lo largo de las sesiones, los estudiantes conocen el papel de las ramblas en la conservación de la biodiversidad y la prevención de riesgos relacionados con el cambio climático y proponen medidas para ser más sostenibles en su vida diaria. Unos días después, un centenar de estudiantes del mismo centro se involucraban en la restauración de la Rambla del Cañar con una actividad de control de especies exóticas y plantación y mantenimiento de especies autóctonas.
El cambio climático puede suponer la modificación de los ciclos de lluvias o cambiar la periodicidad y la intensidad de tormentas o sequías. Esto puede causar efectos en el ciclo hídrico y aumentar la frecuencia e intensidad de los incendios. Finalmente, los cambios en la disponibilidad de agua o los efectos catastróficos pueden derivar en modificaciones de la biodiversidad y favorecer la propagación de especies exóticas invasoras.
La actividad se ha desarrollado en el marco del proyecto “Adaptación al Cambio Global de ecosistemas de rambla en ambientes semiáridos a través de la restauración ecológica”, iniciativa que cuenta con el apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica a través de la Fundación Biodiversidad.