- La Asociación de Naturalistas del Sureste ha remitido a la Delegación del Gobierno en Murcia alegaciones contra la una megaplanta fotovoltaica por sus impactos sobre la biodiversidad.
- La tortuga mora, el alzacola rojizo y el águila perdicera serán las especies más afectadas.
La Asociación de Naturalistas del Sureste ha remitido unas extensas alegaciones al proyecto de una mega-planta fotovoltaica de más de 500 hectáreas prevista entre la Sierra de Enmedio y el Cabezo de la Jara en Puerto Lumbreras. El proyecto denominado “Planta generadora de Energía Fotovoltaica Carril de 507 MWp y 400 MWn y sus infraestructuras de evacuación”, supondrá además de la ejecución de la planta, la construcción de 20 km de un nuevo tendido eléctrico.
La Asociación considera que el desarrollo de energías renovables y la descarbonización de la actividad económica son objetivos irrenunciables, pero estos no pueden alcanzarse mediante la ocupación de territorios valiosos y necesarios para la conservación de la biodiversidad. Por esta razón, resulta imprescindible una planificación de este tipo de energía y someter a una Evaluación Ambiental Estratégica la implantación de la energía fotovoltaica en la Región de Murcia.
Los principales impactos de la planta fotovoltaica derivan de la ocupación de terrenos de escaso valor económico pero de gran importancia ambiental, así como de la construcción de un extenso tendido eléctrico que recorrerá el valle del Guadalentín. Precisamente, la extraordinaria longitud del tendido evidencia que la ubicación ha sido seleccionada buscando terrenos de bajo precio.
En concreto, la ejecución va a suponer, tal y como reconoce el propio EsIA, la pérdida y artificialización de extensas áreas de campeo de aves rapaces protegidas (águila real, búho real y águila perdicera), cuya mortalidad, además, se va a ver incrementada por el riesgo de colisión con el tendido eléctrico. Otras especies singulares existentes en la zona son el alcaraván, el cuervo, el halcón peregrino o la carraca, también se verán afectadas por la pérdida de calidad de los territorios.
Mención especial requiere la presencia en la zona de proyecto de alzacola rojizo, especie catalogada como Vulnerable a nivel estatal y que ha sufrido un grave declive en la Región de Murcia (ya se encuentra virtualmente extinguida en la vecina Comunidad Valenciana). Se trata de una pequeña ave muy amenaza que cuenta, actualmente, con poco más de 50 territorios controlados en la Región de Murcia y que precisa de zonas agrícolas de elevada calidad ambiental.
Otro aspecto de máxima preocupación ambiental es la afección a una zona de extraordinaria importancia para la tortuga mora, ya que la zona de proyecto supone el único punto de conexión (corredor) entre las poblaciones del norte con las del sur del Valle del Guadalentín. Además, la ejecución de la instalación afectaría a parcelas con poblaciones confirmadas de tortuga mora, según un estudio de la Universidad Miguel Hernández.
Por todo lo anterior, la Asociación ha solicitado que se desestime el proyecto y se adopten medidas para garantizar la conservación y funcionalidad a largo plazo de los espacios valiosos, ya sean agrícolas o de piedemonte, que son claves para el sostenimiento de la biodiversidad y la coherencia de la Red Natura 2000.