Durante la pasada semana, miembros de ANSE realizaron reuniones y encuentros con miembros de diversas entidades de Albania, con el objetivo de poner en común información sobre el presente y propuestas de futuro en la gestión de los humedales costeros. Además, se visitó el Parque Nacional Divjaka-Karavasta, que cuenta con el mayor humedal litoral del país. estos encuentros han sido financiados por el programa Alfred Toepfel Scholarship y se realizan en el marco y como complemento de diversos proyectos y campañas que realiza ANSE.
La pasada semana, miembros de ANSE realizaron encuentros con varias ONGs ambientales y la Administración de Zonas Protegidas encargado del PN Divjaka-Karavasta, para dar a conocer el Mar Menor entre los miembros de las entidades albanesas y conocer la situación y las amenazas de la laguna de Divjaka y humedal asociado. También se asistió a actividades de educación ambientad desarrolladas en centros escolares de las poblaciones ubicadas en el área protegida. Las asociaciones albanesas que han participado en el encuentro son INCA (Institute for Nature Conservation in Albania), PPNEA (Protection and Preservation of Natural Environment in Albania ), ETMI (Environmental and Territorial Management Institute) y REC-Albania (Regional Environmental Center – Albania), aunque también ha habido contacto con EuroNatur Stiftung y AOS (Albanian Ornithological Society). El objetivo de los encuentros ha sido intercambiar información sobre cómo se involucra la siciedad civil y las ONGs en la gestión y la conservación de las áreas protegidas, así como la mejora de la compatibilización de las actividades tradicionales como la pesca y la agricultura en estos espacios protegidos.
El Parque Nacional Divjaka-Karavasta, protegido desde 1994, abarca un área de más de 22.200 hectáreas en el litoral albanés, cuyo principal valor es el humedal, formado por una laguna principal y varias más pequeñas, asociadas a esta, y separados del Mar Adriático por una barra de arena. Incluye una gran diversidad de ecosistemas y especies y su paisaje recuerda lo que el Mar Menor fue hace un siglo, incluyendo algunos usos tradicionales, pero con un área montañosa muy cercana a la costa. La laguna cuenta con una población de medio centenar de parejas de Pelícano ceñudo (Pelecanus crispus) que casi llegó a desaparecer durante la pasada década.
El área protegida incluye varias poblaciones que suman casi 9000 habitantes, y las actividades económicas actuales más significativas son la agricultura y la pesca, ambas realizadas de forma tradicional y de baja escala, así como turismo, con diversos pequeños hoteles, pensiones y restaurantes familiares. El área tiene una presión humana mucho menor a la que existe en otras zonas costeras como el Mar Menor, pero se encuentra amenazada por la propuesta de construcción de un gran resort turístico.
Aunque la población local no se encuentra involucrada activamente en la conservación, algunas organizaciones ambientales batallan por la conservación del parque, conlaborando con la Administración del Parque y estableciéndose en contra de la decisión del la Administración Nacional de establecer el resort.
El principal objetivo de la visita era conocer la participación de la sociedad civil y las ONGs en la conservación y gestión de las áreas naturales y la relación entre los cuerpos ambientales, las ONGs y los sectores económicos.
El encuentro se ha realizado con la financiación del programa Alfred Toepfer Natural Heritage Scholarships de la Federación EUROPARC, con el apoyo de Alfred Toepfer Stiftung F.V.S, y en el marco del proyecto Acciones para la conservación y recuperación de los recursos pesqueros y biodiversidad en la laguna del Mar Menor y su entorno, desarrollado por ANSE en colaboración con WWF.