En el cañaveral de la Contraparada se forma un importante dormidero de golondrinas, donde se pueden llegar juntar miles de individuos que se refugian para pasar la noche antes de emprender su viaje hacia África. En la última sesión llevada a cabo el miércoles 23, entraron a dormir más de 5000 ejemplares, recién llegadas de Europa con los vientos del NE que traen las últimas borrascas.