Muchas aves migratorias abandonan Europa en invierno en dirección al Africa subsahariana. Cuando retornan a nuestro continente para la reproducción se produce un paso masivo a través del Mediterráneo. Las pequeñas islas del Mediterráneo son un lugar excelente para el estudio de este fenómeno ya que tras cruzar sucesivamente el desierto del Sáhara y el Mar Mediterráneo las aves llegan muy mermadas de fuerza y paran en las primeras tierras que avistan, las islas.
El trabajo se enmarca dentro de un proyecto panmediterráneo denominado Piccole Isole (Islas Pequeñas) que agrupa más de veinte estaciones de anillamiento en localidades costeras e insulares estratégicas de todo el Mediterráneo. La red funciona desde hace más de 15 años y ha documentado extensivamente numerosos procesos cruciales en la migración de las aves europeas entre ellas la influencia del cambio climático en los patrones de migración.
La Isla Grosa ocupa un lugar excelente dentro de la red por su posición geográfica extrema muy al oeste y relativamente cerca de Africa, lo que permite abordar patrones de migración bastante diferentes de los cubiertos por otras estaciones de la red Piccole Isole.
Los primeros anillamientos de migrantes tanto en paso posnupcial (otoño) como prenupcial (primavera) en Isla Grosa fueron llevado a cabo por ANSE entre 2005 y 2007 en el marco de un proyecto LIFE sobre conservación de Gaviota de Audouin en la isla, en la que ANSE participó como socio de la administración regional, con responsabilidad sobre el seguimiento biológico. En 2007 ya se llevó a cabo una campaña prenupcial coordinada con Piccole Isole en primavera capturandose más de 1800 aves de 45 especies distintas. La continuidad de actividades generadas por los proyectos LIFE tras su finalización es una de las prioridades de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea. Con esta actividad se pretende dar cumplimiento a esta prioridad. En la campaña participan 9 anilladores expertos, en su mayoría del Grupo de Anillamiento de ANSE, pero también de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC).
ANSE sufraga íntegramente la manutención y transporte hasta el puerto mientras que al Dirección General de Biodiversidad aporta las instalaciones en la isla, reformadas durante el proyetco LIFE, la logística y el transporte a la isla. La aportación de ANSE, incluyendo el trabajo de sus anilladores, puede ser estimada en unos 7000 €.
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