Libélulas y caballitos del diablo
Los Odonatos (libélulas y caballitos del diablo) son insectos que se encuentran en casi todo el mundo excepto en las zonas heladas, y existen alrededor de 6500 especies. La larva tiene una vida acuática y, tras la metamorfosis se convierten en insectos voladores. Son depredadores durante toda su vida, principalmente de otros invertebrados.
La Región de Murcia se encuentra ubicada en una zona estratégica para la presencia de un elevado número de especies. Su cercanía con la costa africana permite la observación de especies de distribución norteafricana muy raras en el resto de la Península, pero también podemos encontrar especies comunes con el centro y norte de Europa. La gran variedad de zonas húmedas que encontramos en la Región (humedales y salinas litorales, arroyos de aguas dulces en alta montaña, embalses, balsas de riego y tramos medios y bajos de ríos) permiten la presencia de más de 40 especies citadas hasta la fecha.
ANSE y los caballitos del diablo
ANSE comenzó a conocer la distribución de las libélulas y caballitos del diablo en diversos proyectos del Programa Voluntariado en Ríos. Desde entonces, han estado presentes en diversos proyectos. En la actualidad además de los diversos seguimientos que se vienen realizando, se pone en marcha una base de datos colaborativa, para recopilar los datos existentes.
Más información
Guía de odonatos de la Región de Murcia (2019) (7,2 MiB, 8.831 descargas)
Primeros datos y expansión de Trithemis kirbyi Selys, 1891 (Odonata: Libellulidae) en la provincia de Murcia (SE España) (811,2 KiB, 1.010 descargas)
Se documenta el proceso de colonización de la provincia de Murcia por parte de la especie Trithemis kirbyi Selys, 1891 entre los años 2012 y 2017.
Revisión de las especies de odonatos presentes en la Región de Murcia (6,1 MiB, 4.963 descargas)
TFM
Las libélulas y caballitos del diablo en la cuenca del Segura (345,1 KiB, 3.378 descargas)
Tríptico
Conócelos
Como en todos los insectos, el cuerpo de los odonatos se divide en cabeza, tórax y abdomen.
Tienen grandes ojos compuestos, y tres ocelos u ojos simples. La vista es el sentido más importante de estos animales. El aparato masticador, provisto de una mandíbula con dientes, es característico del grupo.
Tienen fuertes músculos que les permiten volar a velocidades hasta 50 km/h, girar, cernirse y volar hacia atrás. Sus alas tienen nerviaciones y no se pueden plegar a lo largo del cuerpo. El espacio delimitado por las venas se llaman celda o celdilla. La disposición de algunas celdas tiene interés taxonómico. En el extremo de cada ala, poseen una célda opaca coloreada, llamada pterostigma.
El abdomen es largo y está formado por diez segmentos, más un undécimo segmento vestigial. Los machos presentan la abertua genital en el noveno segmento, y el órgano copulador, en la parte inferior del segundo y tercer segmentos. Además presentan estructuras para sujetar a la hembra durante la cópula y, en ocasiones, durante la puesta, y son específicos de cada especie, por lo que dificultan la cópula entre individuos de diferentes especies.
La larva es acuática y capaz de andar y nadar. Son carnívoras, como los adultos, y buenas cazadoras, gracias a que poseen buena visión, complementada por las antenas, y un labio inferior, llamado máscara, que es capaz de proyectarse hacia delante en décimas de segundo y atrapar a sus presas. Tras un número determinado de mudas, que les permite el crecimiento, que puede durar hasta varios años, trepa por una piedra o una planta, donde permanecen inmóviles (la posición es característica de la especie) y realizan a metamorfosis.
Los adultos son voladores y, se mueven, alejándose de los puntos de agua. Los machos y las hembras se diferencian por el color y el comportamiento.
Los machos pueden tener un comportamiento territorial en zonas que consideran idóneas para la reproducción. Las hembras, por el contrario, suelen dispersarse más que los machos y sólo se aproximan a los cuerpos de agua para reproducirse.
Para la cópula, el macho y la hembra forman un, en el que el macho agarra a la hembra. Algunas especies realizan la puesta en tándem, y otras, ya se han separado.
Identificación
Los odonatos se dividen en dos grupos que se diferencian a simple vista: libélulas (Anisópteros) y caballitos del diablo (Zigópteros). A continuación describimos algunos caracteres morfológicos fácilmente observables de las especies presentes en nuestro rango de los géneros más comunes. Te recordamos que para una correcta identificación es necesario utilizar una guía de campo y, en muchos casos, una lupa binocular.
Libélulas | Caballitos del diablo o Zigópteros | Libélulas o Anisópteros |
---|---|---|
Cuerpo | Delgado | Robusto |
Forma de las alas | Alas de igual tamaño | Alas posteriores de distinto tamaño y forma que las anteriores |
Posición de las alas cuando descansa | Plegadas sobre el abdomen | Abiertas, en posición horizontal |
Cabeza | Pequeña | Grande |
Ojos | No muy grandes y separados | Grandes y prominentes. Se tocan entre sí (excepto en Gomphus) |
Zigópteros o Caballitos del Diablo
Anisópteros o Libélulas
¿Dónde viven?
La vida de las libélulas y los caballitos está ligada a los puntos de agua, sobre todo, para la época de cría e, indudablemente, durante la etapa larvaria. Sin embargo, los adultos, voladores, pueden separarse metros e incluso kilómetros de las zonas de puesta, especialmente en el caso de las libélulas.
Hay ciertas características del hábitat que influyen en las especies que se pueden encontrar en una zona, como por ejemplo la tipología del punto de agua o la presencia de vegetación. Algunas de las más significativas, serían:
- Movimiento del agua. Suele haber diferencias entre las comunidades de aguas estancadas (lagos, lagunas, estanques, embalses, balsas, pozas o abrevaderos) y aquellas presentes en aguas corrientes (ríos, arroyos, ramblas, canales o acequias).
- Permanencia del punto de agua: puntos de agua permanentes, semipermanentes o temporales.
- Características fisicoquímicas del agua, como la salinidad, la claridad, o la presencia de nutrientes.
- Vegetación. La presencia de vegetación suele ser un factor clave para la elección de un punto de agua como zona de cría, ya que las plantas son imprescindibles para la puesta, o para sujetarse a la hora de realizar la metamorfosis.
- Otras características que también pueden influir será el tipo de sustrato, ya que algunas larvas se entierran en el limo, o la presencia y abundancia de alimento.
Importancia del hábitat
La etapa larvaria puede ser muy larga, y durar, incluso, más de un año. Por ello, el mantenimiento de las condiciones de los puntos de agua es imprescindible para la supervivencia de este grupo. Ciertas especies son muy sensibles a las modificaciones de hábitat, aunque otras tienen menos requerimientos. Así, muchas especies se ven amenazadas por la contaminación del agua, o por las limpiezas de cauces, que al eliminar la vegetación arrastran con ella la mayor parte de los seres vivos que se encuentran en el hábitat.
¿Cómo colaborar?
Si tienes datos o imágenes de libélulas o caballitos del diablo, puedes enviárnoslos a través del formulario que encontrarás más abajo. No tienes que rellenar todos los datos que aparecen, pero a mayor información, mejor podremos conocer estas especies.
Si tienes varias citas, ponte en contacto con nosotros y te podemos enviar un archivo excel para que sea mucho más cómodo introducir tus datos.
Para saber más sobre este grupo, o ayudarte en la identificación de la especie, consulta la pestaña Conócelos. y para saber más sobre su hábitat, consulta la pestaña ¿Dónde viven?.
Además, puedes hacerte voluntario. En algunas de nuestras actividades trabajamos en el seguimiento de este grupo.