Nuevo corredor ecológico para promover la conservación de polinizadores y evitar la pérdida de biodiversidad. Usamos jardines urbanos para favorecer la conservación de los polinizadores y la diversidad botánica mediante alianzas del sector medioambiental, educativo y empresarial en acciones sostenibles.
El pasado miércoles 3 de febrero, tuvo lugar en el CIFEA de Molina de Segura una iniciativa de ANSE incluida dentro del proyecto “Corredores agrícolas para la adaptación al cambio climático de poblaciones de polinizadores”, donde los alumnos del Ciclo Formativo de Educación y Control Ambiental plantaron distintas especies de flora autóctona para favorecer la acción de estos en las zonas urbanas.
Esta actuación está incluida dentro del programa de educación ambiental de ANSE, que fomenta la participación de los centros educativos a través de la sensibilización sobre la importancia de la polinización y la posibilidad de crear jardines urbanos que favorezcan hábitats propicios para conservar los polinizadores en dichos entornos.
El alumnado de 2º de ECA (Educación y Control Ambiental) ha estudiado la importancia de los polinizadores, sus amenazas a nivel global, los principales tipos y las técnicas para favorecer su presencia en los espacios verdes más próximos como huertos urbanos, escolares, jardines o nuestros propios patios y terrazas sin necesitar grandes superficies.
Según la Estrategia Nacional para la Conservación de Polinizadores, solo en la UE, alrededor del 84 % de las especies de cultivos y el 78 % de flores silvestres dependen, al menos en parte, de la polinización animal. Siendo en concreto las abejas, las responsables de más de un tercio de la producción mundial de alimentos.
El objetivo de este proyecto educativo es dar a conocer el papel primordial que juegan los polinizadores en el medio ambiente y en concreto el impacto positivo que pueden tener dentro de los entornos urbanos. Al realizar su actividad diaria, transportan el polen para una correcta reproducción entre las especies vegetales de tal manera que, sin ellos, descendería la diversidad vegetal, que finalmente desaparecería junto con los organismos que dependen de ellas, lo que tendría graves consecuencias ecológicas, sociales y económicas.
Una vez estudiada la importancia de la polinización animal para la diversidad botánica, para adaptar los entornos urbanos ante las presiones del cambio climático, etc., la actuación concluyó con el diseño y la creación de un jardín de polinizadores en el propio CIFEA de Molina de Segura. El nuevo jardín ocupa un área de 150 m² con cerca de 200 plantas, compuestas de 15 especies autóctonas, con diferentes épocas de floración para procurar atraer polinizadores durante todo el año, de las cuales podemos destacar el aliso de mar (Lobularia maritima), la caléndula o botón de oro(Calendula officinalis), la lavanda (Lavandula dentata), entre otras.
La iniciativa se enmarca en el proyecto “Corredores agrícolas para la adaptación al cambio climático de poblaciones de polinizadores” con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, así como la empresas Naturgreen y Ecomil. El proyecto cuenta con la supervisión científica del Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (IMIDA).