ANSE denuncia la destrucción de humedales en la Región de Murcia y el retraso de más de 10 años en su protección

En el día mundial de los humedales, la Asociación de Naturalistas del Sureste denuncia la delicada situación de los humedales de nuestra Región, incluso de aquellos que se encuentran aparentemente protegidos por la legislación. Ausencia de herramientas de gestión, incumplimiento de los compromisos de protección e incluso destrucción directa son algunos de los males que afectan a nuestras zonas húmedas ante la pasividad de las Administraciones.

Humedal ¿protegido? de la Boquera de Tabala (Zeneta, Murcia)

Ausencia de herramientas de gestión

Los humedales protegidos de la Región de Murcia carecen en su mayor parte de adecuadas herramientas de planificación, ordenación y gestión. Así, los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) de la mayor parte de los humedales incluidos en la Red Espacios Naturales Protegidos se enfrentan a una eterna tramitación iniciada hace más de una década (1998).

En la actualidad, zonas húmedas tan relevantes como “Espacios Abiertos e Islas del Mar Menor”, “Saladares del Guadalentín” o “Ajauque – Rambla Salada” no disponen aún de PORN aprobado definitivamente, lo que permite en la práctica que se sucedan continuas agresiones a estos espacios como uso público incontrolado, vertidos de residuos, etc.

Por otro lado, la elaboración y aprobación de un documento autonómico de planificación como la “Estrategia para la conservación y regeneración de las zonas húmedas” prevista por la Estrategia Regional de la Diversidad Biológica, no se ha materializado aún.

Por todo lo anterior, ANSE pide a la Dirección General de Patrimonio Natural y Biodiversidad que proceda a la aprobación definitiva de los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales de los humedales y a la elaboración de la Estrategia de zonas húmedas.

Incumplimiento de los compromisos de protección

Ni siquiera la situación de los humedales artificiales (creados por actividades humanas) resulta más halagüeña. Es el caso de humedales artificiales como las “Lagunas de las Moreras” (Mazarrón) o las “Lagunas de Campotéjar” (Molina del Segura) de interés para la avifauna por albergar anátidas (patos) globalmente amenazadas como la malvasía o la cerceta pardilla.

Si bien los responsables políticos se ha comprometido en los últimos años y en diversas ocasiones a su protección, finalmente sólo se está tramitando la inclusión de estos dos humedales en el Listado de Humedales de Importancia Internacional conocido coloquialmente como “Humedales Ramsar”: una figura de protección de escaso alcance legal y que aún no se han materializado.
Por esta razón, ANSE considera que ambos espacios deberían designarse con urgencia como Zonas de Especial Protección para las Aves e incluirse en la Red Natura 2000.

Destrucción de humedales protegidos con dinero público

La destrucción directa por obras públicas supone quizás la mayor muestra de negligencia de las Administraciones hacia nuestras zonas húmedas. En este sentido, ANSE recuerda que una parte importante de la Boquera de Tabala, principal zona húmeda del municipio de Murcia y protegida por el Plan General, ha sido destruida por una planta de tratamiento de materiales de la autovía Santomera-San Javier ejecutada por las empresas PLODER y CHM. Las obras han sido promovidas por la Dirección General de Carreteras y han contando con financiación de fondos FEDER.

Tras meses de denuncias ante diversas Administraciones, y finalizadas las obras de la autovía, se ha iniciado el desmantelamiento de la planta. Ahora, ANSE espera que la Dirección General de Carreteras cumpla con su compromiso de restaurar los terrenos afectados inmediatamente y pide al Ayuntamiento de Murcia que actúe para garantizar la protección efectiva de la Boquera de Tabala